Santa Cecilia en Segorbe
Tras el siempre agotador fin de semana de Santa Cecilia (y eso que no soy de los que velan demasiado) es hora del repasar y hacer balance de los momentos vividos y recordar las sensaciones y sentimientos que afloran durante estos días.
Sentimiento de orgullo porque, de ahora en adelante, una sobrina mía será mi compañera en la Orquesta «José Perpiñán». ¡¡¡ Mi más cariñosa enhorabuena Vero !!!. Deseo de todo corazón que tu estancia con nosotros sea larga y fructífera y que disfrutes muchos años de la música, como has disfrutado estos días de fiestas. Doy fé que ilusión y talento los tienes a raudales.
Sentimiento de satisfacción por mi actuación con mi «compy» Mafra en el concierto de solistas. Creo que hicimos un más que digno papel y así nos lo reconoció el público, tanto en la sala como posteriormente, en la calle. Mi agradecimiento también a Josep y la Banda que nos llevaron en volandas. Satisfacción también por mi pequeño granito de arena en la actuación de Bego y Blanca que, superando sus nervios y sus dudas, nos brindaron con una gran actuación que demuestra que el trabajo bien hecho siempre tiene recompensa.
Sentimiento de admiración por todos los solistas que intervinieron en el concierto. Por la variedad y dificultad de las obras interpretadas y por la heterogeneidad, tanto de edades como de experiencia, de los músicos solistas. Desde gente veterana (veteranísima, diría yo) como Carlos Gimeno y un servidor, hasta recién llegados como José Antonio Novella y Pedro Soriano. El futuro está asegurado, desde luego.
Sentimiento de agradecimiento por la insignia de plata que nos fue entregada a los músicos con más de 25 años en la Banda. En esos momentos te pasan por la cabeza tantos y tantos recuerdos de todos los años vividos, sobre todo, cuando miras las fotos que engalanan las paredes del local social, con todas esas caras de «pipiolillos» que teníamos al principio de los 80. Junto a la pujante juventud que viene pegando fuerte, hemos conseguido una Banda con una perfecta comunión entre veteranía y juventud que le da empaque y solidez.
Sentimiento de alegría por el buen ambiente que se ha vivido una vez más en todos los actos. En los tradicionales como las cenas, comidas y pasacalles, pasando por los ya consolidados, como el concurso de paellas, y como los de nuevo cuño como el novedoso «flashmob». Es muy gratificante comprobar la buena sintonía existente entre todas las «pequeñas familias» (banda sinfónica, orquesta, banda sénior, banda juvenil, banda infantil y escuela) que hacen que nuestra «Gran Familia» de la Sociedad Musical de Segorbe sea cada vez más grande y más sólida.
Y ya solo queda dar la enhorabuena a la clavaria Mª Pilar Magdalena, a sus damas y clavariesas, esperando que hayan disfrutado con la experiencia; a la Asociación de Santa Cecilia por su buen hacer año tras año; a los nuevos músicos, deseando nos hagan disfrutar con su música durante muchos años y, sobre todo, a la Junta Directiva, porque son el pilar en que se sustenta todo este edificio que es la Sociedad Musical de Segorbe.
¡¡¡ El año que viene, más y mejor !!!
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